Centro para la Recuperación Integral del Dolor
Descripción general
El dolor crónico y los trastornos neurológicos dolorosos complejos afectan a millones de estadounidenses, muchos de los cuales han probado múltiples tratamientos sin alivio. El dolor puede interferir con la capacidad de una persona para trabajar, participar en actividades sociales y recreativas, y puede afectar las relaciones con la familia o los amigos. Con el tiempo, las personas pueden restringir sus actividades, lo que a su vez hace que se vuelvan menos en forma física hasta el punto de que incluso las actividades menores aumentan el dolor y la fatiga.
La investigación de los últimos 40 años ha demostrado que el dolor agudo asociado con lesiones, enfermedades o cirugías se debe principalmente a cambios en los tejidos lesionados. El dolor crónico, por el contrario, se debe principalmente a cambios en el sistema nervioso central. Estos cambios aumentan su sensibilidad hasta el punto de que incluso la estimulación y la actividad inofensivas pueden ser dolorosas. Si bien el dolor que experimentan las personas es principalmente el resultado de estos cambios neurológicos, los cambios en la función y la calidad de vida están más determinados por factores como la salud general, el acondicionamiento físico, el impacto psicológico, los cambios ambientales y los factores sociales. Lo mismo se aplica al sufrimiento general.
El Centro para la Recuperación Integral del Dolor se formó con el objetivo general de proporcionar el tratamiento y la evaluación más efectivos para las personas con dolor crónico basado en un modelo de atención “integral”. La base de nuestro enfoque radica en la atención a los factores neurológicos/biológicos, psicológicos y sociales que afectan el dolor. Creemos que las personas con dolor crónico tienen necesidades únicas y complejas que requieren un enfoque multidisciplinario especializado. El equipo de Derechos Civiles y Políticos trabaja en conjunto para ofrecer este enfoque integral de la atención en un servicio centralizado.