El conocimiento es poder.
“En los últimos tres a cinco años, un número creciente de informes sugiere que las personas que se inyectan drogas (PID) en Rusia, Ucrania y otros países ya no usan amapolas u opio crudo como material de partida, sino que recurren a medicamentos de venta libre que contienen codeína (por ejemplo, Solpadeína, Codterpin o Codelac). Según se informa, la codeína se convierte en desomorfina (UNODC, 2012; Gahr et al., 2012a, 2012b, 2012c; Skowronek, Celinski, & Chowaniec, 2012). La droga se llama Magia rusa, en referencia a su potencial de intoxicación por opioides de corta duración o, más común, a su nombre callejero, krokodil. Krokodil se refiere tanto al clorocoduro, un derivado de la codeína, como a los daños excesivos reportados, como la piel descolorida (verde, negra) de sus usuarios, como resultado de infecciones y úlceras en la piel de áreas extensas. En este punto, Rusia y Ucrania parecen ser los países más afectados por el uso de krokodil, pero Georgia (Piralishvili, Gamkrelidze, Nikolaishvili, & Chavchanidze, 2013) y Kazajstán (Ibragimov & Latypov, 2012; Yusopov et al., 2012) han reportado el uso de krokodil y lesiones relacionadas también.”