Aceite de Coco Para niños Sanos

El aceite de coco está siendo elogiado como uno de los nuevos productos saludables imprescindibles, especialmente cuando se trata de niños. El aceite de coco es un aceite comestible que se extrae de la carne blanca carnosa de los cocos y se utiliza en alimentos, medicamentos y en la industria. Tiene un alto contenido de grasas saturadas, lo que significa que se oxida lentamente y puede durar hasta dos años sin volverse rancio. Es rico en antioxidantes y está repleto de agentes microbianos y antibacterianos naturales, lo que probablemente sea la razón por la que recientemente ha estado tomando por asalto a la industria de alimentos saludables. Sin embargo, muchas organizaciones de salud (incluida la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos y el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido) han desaconsejado el consumo de grandes cantidades, por lo que estamos echando un vistazo al aceite de coco para comprobar si es seguro para los niños.

El aceite de coco se usa comúnmente en platos del sur de Asia como saborizante, especialmente en curry. Estudios recientes de dietas nativas con alto contenido de aceite de coco muestran que los consumidores generalmente gozan de buena salud y sufren menos enfermedades modernas que en las naciones occidentales, donde rara vez se usa en la cocina. Algunos de los beneficios para la salud reportados en adultos incluyen:

  • Aumentar el metabolismo y aumentar la temperatura corporal, mejorando así la salud de la tiroides
  • Pérdida de peso
  • Resultados positivos en diabetes tipo 1 y tipo 2
  • Combatir virus e infecciones bacterianas
  • Aumento de los niveles de energía
  • Mejorar los efectos de la enfermedad de Alzheimer

Algunos defensores del aceite de coco recomiendan agregar 2 cucharaditas de aceite de coco diariamente a la dieta de un niño, ya sea directamente de una cuchara, agregado a batidos o agregado a pasteles horneados. Sin embargo, la mayoría de los niños de hoy en día obtienen suficiente grasa en sus dietas y hay otras formas de aprovechar el aceite de coco para sus hijos.

Es un gran aceite de masaje y masajear la piel de su bebé es una excelente manera de crear lazos afectivos. Puedes comprar aceite de coco en tu farmacia local – es bastante barato. el aceite suele ser sólido a temperatura ambiente, así que saque un poco y deje que se derrita en la mano y luego frote en la piel del bebé. Es uno de los aceites más seguros para usar en bebés y niños.

Una cucharadita de aceite de coco frotado en el cuero cabelludo de un bebé ayudará a eliminar la costra láctea y nutrir el cuero cabelludo.

El aceite de coco se puede aplicar directamente a las mordeduras y picaduras para ayudar a aliviar la picazón y el ardor y acelerar el proceso de curación.

Si su hijo sufre de fiebre del heno u otras alergias, intente frotar un poco de aceite de coco en el interior de las fosas nasales: el polen y el polvo se adherirán al aceite en lugar de ser inhalados hacia los pulmones.

El aceite de coco se está convirtiendo en un tratamiento popular para la erupción del pañal: es calmante y totalmente natural sin productos químicos.

Cuando el bebé esté dentiendo, intente frotar un poco de aceite de coco directamente sobre las encías para un alivio rápido.

Las raspaduras y los cortes pueden curarse más rápido si se aplica un poco de aceite de coco; actuará como una barrera para evitar que los gérmenes entren en la herida.

Ya sea que elija dejar que sus hijos coman aceite de coco o no, la aplicación directa sobre la piel es segura y es un gran remedio natural para mantener en su hogar en todo momento.

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