Cómo tomar la temperatura de tu bebé
¿Qué clase de termómetro debo usar?
Si piensas que tu bebé tiene fiebre, es importante que sepas su temperatura exacta y para eso necesitas un buen termómetro digital. Aquí te ayudaremos a elegir uno. (Lee más sobre cómo comprar un termómetro.)
Los termómetros digitales multiuso se venden en farmacias y droguerías y, en Estados Unidos, cuestan menos de 10 dólares. Son fáciles de usar y de leer, y además son rápidos. La mayoría te da un resultado exacto entre diez segundos y dos minutos después de ponérselo al bebé.
La mayoría de estos termómetros se pueden utilizar por vía rectal, oral (bajo la lengua, aunque esta opción solo la podrás usar en tu bebé a partir de los 4 años) o debajo del brazo. Si utilizas más de un método para tomar la temperatura de tu bebé, es mejor designar un termómetro para cada uno de ellos para evitar la contaminación por bacterias.
La manera más precisa de tomarle la temperatura a tu bebé es por vía rectal, y la mejor forma de hacerlo es utilizando un termómetro rectal diseñado específicamente para ello. Busca uno que tenga una punta flexible y un mango ancho que no te permite insertarlo más de una pulgada (2,5 cm). Si accidentalmente insertas el termómetro más de lo debido porque, por ejemplo, tu bebé se pone muy inquieto o se mueve mucho, podrías perforarle el recto.
Otras opciones más costosas incluyen los termómetros de arteria temporal, los cuales usan un escáner infrarrojo que mide la temperatura con tan solo deslizarlo sobre la frente del bebé, y los termómetros digitales de oído, llamados termómetros timpánicos, que a veces no son muy fáciles de usar.
Según los médicos, los otros métodos para medir la temperatura del bebé, como los chupones con termómetro y las tiritas sensibles a cambios de temperatura que se colocan en la frente del bebé son demasiado imprecisos para que sean útiles.
Independientemente del método que elijas, no tomes la temperatura de tu niño inmediatamente después de bañarlo, cuando es probable que su temperatura esté más elevada. Espera por lo menos 20 minutos después de bañarlo para obtener una lectura más precisa. Lo mismo pasa si tu bebé ha estado envuelto “como tamalito” en una manta.
Nota: los termómetros antiguos de vidrio se pueden romper y se puede salir el mercurio de su interior, que es tóxico. Si todavía tienes en casa un termómetro antiguo de mercurio, debes deshacerte de este adecuadamente. (Busca en línea un sitio especial, donde puedes desechar desperdicios tóxicos cerca de tu hogar).
Cómo usar un termómetro rectal
A algunos bebés no les importa que les tomen la temperatura a través del recto, mientras que otros odian este procedimiento. Si tu bebé protesta, es mejor primero tomarle la temperatura en la axila. Si la primera lectura está por arriba de los 99 grados Fahrenheit (37 grados centígrados), tómale la temperatura rectal para obtener una medición más precisa.
Aquí te explicamos cómo usar el termómetro rectal:
- Para preparar el termómetro, limpia la punta con alcohol o con un poco de jabón y agua tibia. Enjuágalo con agua fría. Luego cubre la punta con un poco de vaselina para facilitar la inserción.
- Acuesta a tu bebé sobre su espalda, ya sea en la cama o en una mesa para cambiar pañales. Es probable que tu bebé se sienta cómodo en esta posición, ya que así está acostumbrado a acostarse cuando le cambias de pañal. Además, podrás distraerlo mejor si él puede ver tu cara. Otra opción es sostener a tu bebé en tu regazo y acostarlo boca abajo, dejando que sus piernas le cuelguen sobre el lado de tu muslo.
- Presiona el botón del termómetro para prenderlo. Introduce suavemente el bulbo entre tres cuartos de pulgada a una pulgada (2 a 2,5 centímetros) por su recto, o hasta que la punta del termómetro desaparezca.
- Sostén firmemente sus nalguitas agarrándolas con la palma y los dedos de la mano con la que sostienes el termómetro. No dejes ir el termómetro, o puede que no permanezca en su lugar si tu bebé comienza a moverse.
- Cuando el termómetro suene, quítaselo y lee la temperatura. Ten en cuenta que la introducción de cualquier cosa en el recto de tu bebé puede estimular sus intestinos, así que no te sorprendas si se hace popó cuando le saques el termómetro. Limpia el termómetro con agua y jabón o con alcohol, luego enjuágalo y sécalo antes de guardarlo.
Cómo usar un termómetro de arteria temporal (en la frente)
Los termómetros de arteria temporal son muy fáciles de usar, una vez que aprendes la técnica.
Asegúrate de leer cuidadosamente las instrucciones. Si ya no las tienes, las encontrarás en la página web del fabricante. Si se te hace difícil, pídele asesoramiento a tu médico.
Básicamente, hay que posicionar el termómetro directamente sobre la frente del bebé en un punto entre las cejas y la línea de crecimiento capilar. Luego se aprieta el botón y se mueve el termómetro en línea recta a lo largo de la frente del bebé (y no hacia abajo o por el lado de la cara).
Sin soltar el botón, aleja el termómetro de la frente del bebé. Después suelta el botón y lee la temperatura.
La forma como estos termómetros determinan la temperatura es bastante sofisticada, pero esencialmente la lectura se basa en una arteria que se encuentra cerca de la superficie de la piel en la frente del bebé.
Cómo medir la temperatura debajo del brazo
Algunos doctores recomiendan tomar la temperatura del bebé por la axila, la cual se llama temperatura axilar. Es un método fácil, conveniente y seguro y lo único que necesitas es un termómetro digital normal.
El inconveniente es que el registro por la axila no es tan preciso como otros métodos. De hecho, una lectura de axila externa puede obtener hasta 2 grados menos que una lectura rectal interna. La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés) sugiere que no uses este método para los bebés menores de 3 meses de edad, cuando una lectura precisa es más importante.
Para tomar la temperatura por la axila, desviste a tu bebé de la cintura para arriba y siéntalo en tus piernas o a tu lado. Trata de mantenerlo relajado y ocupado alimentándolo, o mostrándole un libro o un juguete.
Asegúrate de que la zona debajo del brazo de tu bebé esté seca y luego desliza la punta del termómetro bajo su axila. La punta necesita estar en contacto total con su piel, así que sostén el brazo de tu bebé con firmeza hacia un costado o crúzalo a través de su pecho. Cuando el termómetro emita un sonido, sácalo y revísalo.
Cómo usar un termómetro de oído
Los termómetros de oído suelen ser rápidos, seguros y cómodos. El único problema es que son un poco más difíciles de usar que otros termómetros digitales. De hecho, si no insertas el termómetro de oído correctamente, puede ser difícil tener un registro preciso y coherente. Además, si tu bebé tiene mucha cera acumulada en el oído, eso puede interferir con una lectura precisa.
Si este método te gusta, podrías pedirle al doctor de tu bebé que te muestre cómo utilizar un termómetro de oído o puedes seguir las instrucciones del producto hasta que tengas un resultado consistente. Mientras aprendes a usarlo, sería bueno confirmar los resultados con una lectura rectal. Cuando des en el blanco constantemente, podrás confiar solamente en el termómetro de oído.
Los termómetros de oído no son recomendados para los bebés menores de 6 meses, porque los canales angostos del oído de los bebés pequeños pueden hacer difícil insertar el sensor adecuadamente.
Referencias
AAFP. 2010. Fever in infants and children. American Academy of Family Physicians.
AAP. 2011a. Best ways to take a temperature. Academia Americana de Pediatría. http://www.healthychildren.org/English/health-issues/conditions/fever/Pages/Best-Ways-to-Take-a-Temperature.aspx
AAP. 2011b. Definición de fiebre. Academia Americana de Pediatría.
AAP. 2010. Cómo tomar la temperatura de un niño. Academia Americana de Pediatría. http://www.healthychildren.org/English/health-issues/conditions/fever/pages/How-to-Take-a-Childs-Temperature.aspx Recurso verificado en marzo de 2017]