Conmociones cerebrales
Por Amy McGorry
Recientemente, algunos ex jugadores de la NFL admitieron públicamente que sufrían los efectos de la encefalopatía traumática crónica (CTE), una afección degenerativa del cerebro vinculada a traumas craneales repetidos, como las conmociones cerebrales. El ETC puede provocar pérdida de memoria, agresión, depresión y demencia. Según se informa, se ha encontrado CTE en el cerebro de al menos 50 jugadores de fútbol fallecidos. Este hallazgo ha provocado un movimiento para prevenir las conmociones cerebrales y las condiciones resultantes.
La ECT solía diagnosticarse solo mediante autopsia. Gracias a un estudio histórico en la UCLA este año, los investigadores por primera vez pueden detectar signos de ECT en jugadores vivos a través de escáneres cerebrales específicos. Lamar Campbell, director de relaciones con los medios de la Asociación de Jugadores de la NFL en Atlanta, dice que esto es significativo. “Es importante que los jugadores estén prevenidos para ver si hay algo que puedan hacer para prepararse para lo que está por venir”, dice Campbell, él mismo un ex jugador de la NFL.
Las conmociones cerebrales pueden afectar a cualquiera, no solo a los jugadores de la NFL. Los peligros militares, los accidentes automovilísticos, las caídas, los deportes de contacto e incluso el yoga pueden dejar a una persona en riesgo de sufrir conmociones cerebrales. Desafortunadamente, las conmociones cerebrales a menudo no son tan evidentes como un esguince o una rodilla hinchada, y los atletas a menudo vuelven a los deportes demasiado pronto. Esto puede tener efectos a corto y largo plazo.