La deshidratación puede llevar a complicaciones graves
La deshidratación ocurre cuando usted usa o pierde más líquido del que ingiere, y su cuerpo no tiene suficiente agua y otros líquidos para llevar a cabo sus funciones normales. Si no repone los líquidos perdidos, se deshidratará.
Las causas comunes de deshidratación incluyen ejercicio vigoroso, especialmente en clima caluroso; diarrea intensa; vómitos; fiebre o sudoración excesiva. No beber suficiente agua durante el ejercicio o en clima caluroso, incluso si no está haciendo ejercicio, también puede causar deshidratación. Cualquier persona puede deshidratarse, pero los niños pequeños, los adultos mayores y las personas con enfermedades crónicas están en mayor riesgo.
Por lo general, puede revertir la deshidratación leve a moderada bebiendo más líquidos, pero la deshidratación grave necesita tratamiento médico inmediato. El enfoque más seguro es prevenir la deshidratación en primer lugar. Mantenga un ojo en la cantidad de líquido que pierde durante el clima caluroso, la enfermedad o el ejercicio, y beba suficientes líquidos para reemplazar lo que ha perdido.
COMPLICACIONES
– Lesión por calor. Si no bebes suficientes líquidos cuando haces ejercicio vigoroso y transpiras en exceso, es posible que termines con una lesión por calor, que varía en gravedad desde calambres por calor leves hasta agotamiento por calor o insolación potencialmente mortal.
– Hinchazón del cerebro (edema cerebral). A veces, cuando vuelves a recibir líquidos después de deshidratarte, el cuerpo intenta volver a introducir demasiada agua en las células. Esto puede hacer que algunas células se hinchen y se rompan. Las consecuencias son especialmente graves cuando las células cerebrales se ven afectadas.
– Convulsiones. Los electrolitos, como el potasio y el sodio, ayudan a transportar señales eléctricas de célula a célula. Si sus electrolitos están fuera de equilibrio, los mensajes eléctricos normales pueden confundirse, lo que puede provocar contracciones musculares involuntarias y, a veces, pérdida del conocimiento.
– Shock de volumen sanguíneo bajo (shock hipovolémico). Esta es una de las complicaciones más graves, y a veces potencialmente mortales, de la deshidratación. Ocurre cuando el bajo volumen de sangre causa una caída en la presión arterial y una caída en la cantidad de oxígeno en el cuerpo.
– Insuficiencia renal. Este problema potencialmente mortal ocurre cuando los riñones ya no pueden eliminar el exceso de líquidos y desechos de la sangre.
– Coma y muerte. Cuando no se trata de manera oportuna y adecuada, la deshidratación grave puede ser mortal.
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