¿Qué sucede cuando cruje la espalda? ¿Es bueno o malo?

Mucha gente me pregunta sobre el crujido de las vértebras y sobre si es bueno o malo hacerlo. La gente lo hace muy a menudo, e incluso varias veces al día. Responder a esto es fácil. NO, no es bueno. Aunque tampoco es horrible y hay cosas peores, la verdad es que no ayuda más allá del corto plazo e incluso se podría decir que perjudica en el medio y más aún en el largo plazo.

Pero, antes de todo eso, vamos a empezar por el principio.

¿Qué sucede cuando crujimos las vértebras?

Responder a esto es bastante más complicado. Como puedes ver en éste video, el sonido o crujido (1) no ocurre porque se recolocan las vértebras, ni porque chocan unos huesos con otros, ni nada por el estilo. Lo que ocurre es una implosión del gas disuelto en el líquido sinovial intraarticular que genera ese “crujido” o “chasquido” en particular.

¿Y qué tiene de malo si hago crujir mi espalda?

Siempre que unas vértebras suenan con facilidad existe una hipermovilidad: no existe una restricción de movimiento, por el contrariolas vértebras se mueven demasiado (2). Esto no es más que una compensación de una hipomovilidad (poco movimiento) en un nivel superior, inferior o ambas cosas a la vez.

Un ejemplo didáctico: tienes 10 trabajadores para hacer una tarea. Cuatro de ellos no hacen su trabajo o hacen mucho menos, mientras los otros trabajan lo suyo y lo del de al lado. ¿Quién sufre? ¿Quién llora? La respuesta es clara. Lo que haces cuando crujes estas vértebras con tanta facilidad es mover más aun las hipermóviles, por lo que éstas van a sufrir mucho más y a la larga pueden inflamarse y decirte que ya no quieren moverse provocando mucho dolor; y lo que es mucho peor, será en estos niveles hipermóviles donde se dé el desgaste a largo plazo. Razonable, ¿no?

Pues yo, me siento muy bien cuando me hago crujir la espalda

Claro. Y si en tu empresa de 10 empleados, ves que el trabajo no sale y pegas cuatro chillidos, lo que sucederá es que en el corto plazo el trabajo saldrá adelante con el consiguiente placer, pero solo a costa de que los currantes trabajen más, los vagos se harán los orejas y no participarán más. Pero… ¿a medio plazo? ¿No crees que los buenos trabajadores se hartarán o se pondrán enfermos? Y a largo plazo, lo más probable es que se busquen otra empresa y se marchen. En tu espalda, sucede igual. De hecho nunca es suficiente: siempre quieres crujirte otra vez y sabes bien que en el fondo no te ayuda.

Y entonces, ¿qué hago para no crujir la espalda?

Nada. En ese sentido nada. Solo dejar que las ganas de crujirte y de hacerte sonar la espalda se calmen. Aguantar y dejar que se te olvide. A cambio de eso puedes ayudarte a ti mismo haciéndole algunos automasajes que puedes encontrar en este mismo portal, practicando unos ejercicios de movilización o estiramientos (3) que también te pueden ayudar a sentirte mejor, y si no… ¡Ve al fisio!

Auto-masaje para liberar la tensión de cuello, cervicales y de trapecios.

Relajar musculatura lumbar con un automasaje con pelota. Lumbago-Lumbalgia.

Un fantástico auto-masaje para relajar la musculatura lumbar muy útil en todo tipo de dolores lumbares y distraerte de crujir tu espalda.

Pero y si mi fisio me hacer crujir la espada… ¿Sí vale?

Sí, si lo hace bien con un adecuado estudio y valoración y con unos conocimientos teóricos y técnicos adecuados, en este caso, el fisioterapeuta solo manipulará las vértebras hipomóviles (4) y como mucho las hipomóviles en el sentido de menor movilidad. Ésto será equilibrador para el sistema y es lo que hace que los síntomas mejoren. No lo dudes, cuanto menos te hagas crujir la espalda, menos te lo pedirá (como con cualquier droga) y seguramente menos dolores y malestar tendrás.

Te recomendamos algunos vídeos y un artículo de nuestro portal para que te ayuden a combatir la necesidad de crujir la espalda:

Ejercicio para abrir el tórax y corregir o rectificar la hipercifosis dorsal.

Un útil ejercicio que te enseñamos para que puedas corregir la cifosis o curvatura dorsal abriendo delante en la caja torácica.