Síntomas y Diagnóstico de Cardiopatías Congénitas
Un defecto cardíaco congénito (CC) a menudo se diagnostica en la infancia o incluso antes del nacimiento. Sin embargo, algunos defectos son más difíciles de detectar que otros y es posible que no se diagnostiquen hasta mucho más tarde en la infancia o incluso en la edad adulta.
Evaluación diagnóstica
Si usted o su hijo tienen una cardiopatía congénita, es importante que se haga un seguimiento regular con un cardiólogo. Su cardiólogo puede realizar una serie de pruebas para evaluar su problema cardíaco.
En su cita, su cardiólogo tomará su historia clínica y realizará un examen físico. También puede solicitar un electrocardiograma( ECG o ECG), una radiografía de tórax o un ecocardiograma (película ecográfica del corazón). Los análisis de sangre son particularmente importantes para pacientes con cianosis y corazones de ventrículo único tratados con operaciones de Fontan.
El personal de cardiología hablará con usted sobre cada prueba. No dude en pedirle al cardiólogo, enfermero o técnico que le explique estos procedimientos. Después de que se completen las pruebas, el cardiólogo le explicará los resultados y si se necesita un seguimiento.
A veces, las pruebas iniciales no proporcionan suficiente información para un diagnóstico completo, y es posible que se necesiten más pruebas. Estos incluyen cateterismo cardíaco y angiografía, imágenes por resonancia magnética (RM) y tomografía computarizada, grabación Holter y pruebas de esfuerzo.
Diagnosticar a niños
Los problemas cardíacos graves generalmente se hacen evidentes durante los primeros meses después del nacimiento. Algunos bebés son azules o tienen la presión arterial muy baja poco después del nacimiento. Otros defectos causan dificultades para respirar, problemas de alimentación o aumento de peso deficiente.
Los defectos menores se diagnostican con mayor frecuencia durante un chequeo médico de rutina. Los defectos menores rara vez causan síntomas. Si bien la mayoría de los soplos cardíacos en los niños son normales, algunos pueden deberse a defectos.
Si el problema cardíaco es significativo, es probable que el pediatra o el médico de familia de su hijo lo deriven a un cardiólogo pediátrico. Los cardiólogos pediátricos están capacitados para diagnosticar y tratar problemas cardíacos en bebés, niños y adultos jóvenes. Tienen la experiencia y el equipo para determinar qué pruebas y tratamientos necesitará su hijo, y con qué frecuencia necesitará chequeos cardíacos en el futuro.
Conozca las pruebas comunes asociadas con defectos cardíacos congénitos.