Un Marco de Gestión de Cambios de 3 Pasos para Empresas
El cambio es necesario para que las organizaciones innoven, evolucionen y crezcan. El crecimiento es especialmente relevante en los negocios de hoy, dado que los ejecutivos anticipan que la disrupción digital eliminará el 40 por ciento de las empresas de Fortune 500 en la próxima década. Para mantenerse competitivo y a flote, su empresa debe desarrollar e implementar una estrategia de cambio.
Para adoptar y fomentar con éxito el cambio a nivel organizacional, las empresas necesitan contar con un marco de gestión del cambio que describa los planes, procesos y modelos a seguir. Esto servirá de guía para gestionar el cambio organizacional, independientemente de lo simples o complejos que resulten los cambios recomendados.
Algunos ejemplos comunes de gestión del cambio incluyen el Modelo Kotter, desarrollado por el profesor John Kotter de la Escuela de Negocios de Harvard, y el Modelo McKinsey 7-S, desarrollado por Tom Peters y Robert Waterman en la década de 1970.
En el curso Fundamentos de gestión en línea de Harvard Business School, se presenta un marco de tres pasos que los líderes pueden usar para garantizar una gestión del cambio exitosa. Aquí hay una descripción general de las tres etapas del marco.
Etapa 1: Preparación de la Organización para el Cambio
Primero, en lo que el psicólogo Kurt Lewin considera la “etapa de descongelación”, los gerentes deben ayudar a los empleados a reconocer la necesidad de cambio y asegurarse de que todos estén a bordo del esfuerzo.
En el curso en línea Management Essentials, el profesor de HBS David Garvin explica que los gerentes deben tomar los siguientes pasos para preparar el escenario para el cambio:
- Generar insatisfacción con el status quo
- Crear un sentido de dirección para la organización
- Construir una coalición para ayudar a liderar el cambio
- Elaborar una visión y un plan de acompañamiento
- Transmitir una imagen del futuro que sea convincente y creíble
Las personas pueden ser propensas a resistir el cambio. La “etapa de descongelación” rompe las nociones o creencias anteriores contra el cambio a través de una comunicación efectiva y transparente. Sin una comunicación adecuada, el proceso de gestión del cambio no puede tener éxito.
Etapa 2: Alterar la Forma en que la Organización Hace Negocios
El siguiente paso es alterar las estrategias, estructuras, sistemas, procesos y, lo más importante, el comportamiento de los empleados de la empresa. Lewin sugiere que esta es la etapa más difícil porque requiere que las personas cambien sus comportamientos, que a menudo están profundamente arraigados. En esta etapa, los gerentes deben:
- Aclarar qué comportamientos son aceptables y cuáles son inaceptables
- Ajustar las estructuras clave y los sistemas de incentivos para tener éxito
- Repetir la comunicación de la visión
- Modelar el buen comportamiento
Es importante establecer expectativas claras sobre cómo deben comportarse y trabajar las personas, al tiempo que se empodera a sus equipos en el camino. Esto significa permitir que las personas sugieran cambios en sus propios procesos que eliminen los obstáculos y aumenten su eficacia.
Etapa 3: Asegurarse de Que los cambios se peguen
Esto se puede considerar como la etapa de” congelación”. Para asegurarse de que los nuevos cambios se mantengan, los gerentes deben asegurarse de que estén firmemente anclados en la cultura de la organización. Esto significa prestar mucha atención a las estructuras, los controles, los sistemas y las recompensas.
Los líderes deben centrarse en:
- Integrar los cambios completamente en una cultura
- Evitar el retroceso
- Institucionalizar las nuevas formas de trabajo
- Revisar el progreso
Esta etapa final de la gestión del cambio organizacional garantiza que los empleados no vuelvan a las viejas formas de hacer negocios. Si los empleados volvieran al statu quo original, el tiempo y el esfuerzo necesarios para implementar el cambio organizacional serían irrelevantes y contraproducentes.
El uso de tácticas como el refuerzo positivo puede ayudar a los empleados a comprender la necesidad de consolidar los cambios para que estas nuevas prácticas se conviertan en rutina.
Implementar el Cambio Organizacional
Establecer iniciativas que definan y guíen el cambio organizacional es necesario y valioso a la hora de adaptarse a las demandas de los negocios.
El cambio puede ser un tema de discusión incómodo para cualquier miembro de una organización, independientemente de su posición. Dado que las personas a veces cambian, establecer un nuevo status quo puede ser difícil y rígido.
Es por eso que implementar cambios en una organización requiere un proceso reflexivo, estructurado y deliberado. Al seguir un marco como el establecido en Management Essentials, los ejecutivos que buscan implementar un cambio organizacional pueden simplificar el proceso y aumentar las posibilidades de éxito.
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Esta publicación se actualizó el 5 de noviembre de 2019. Fue publicado originalmente el 2 de noviembre de 2017.
