Yo elijo comer sano: 5 consejos para iniciarte en la comida saludable
5 Consejos fáciles para comer sano a diario
Empieza el día con un desayuno saludable
Imagino lo que estás pensando:
¡El café con leche que no me lo toquen!
¿Verdad?
El caso es que el problema no es el café con leche, sino el azúcar y sacarina que añades. ¿Sabías que el azúcar puede acelerar el envejecimiento?
Si te interesa saber más sobre el azúcar, hace un tiempo hablé en otro artículo sobre todo lo que no sabemos sobre los azúcares.
¿La solución?
¡Fuera todo eso! Educa a tu paladar al sabor del café y la leche y no a ese terrible dulzor innecesario que tomas cada mañana. Al principio lo sentirás raro, pero en unos días, cuando tu paladar se acostumbre amarás el sabor de tu nuevo desayuno.
Hay una cantidad muy variada de edulcorantes que son el mejor sustituto al azúcar.
Y si tienes debilidad por el azúcar, en otro artículo te expliqué en detalle cómo dejar de comer dulces y el azúcar.
Toma una pieza de fruta en lugar de zumo (te aportará más fibra y saciedad).
Elige un pan integral (cuyo primer ingrediente sea pan integral de…) o un pan tipo wasa acompañado con un poquito de queso, atún, salmón ahumado, crema de cacahuete 100%, guacamole o simplemente tomate y aceite, en vez de los típicos embutidos o procesados tan poco saludables.
Solo con estos pequeños cambios ya tienes diferentes recetas sanas y ligeras para empezar bien el día.
Si quieres saber más sobre este momento del día, en otro artículo, te damos 10 desayunos para perder peso.
Que las frutas y verduras sean la base
Muchas pirámides nutricionales dicen que carbohidratos y granos enteros son el primer escalón de tu alimentación saludable cuando la realidad es otra.
La base de tu alimentación deben ser frutas, verduras y hortalizas, las cuales te aportan la misma fibra y energía que muchos granos enteros con el extra de tener muchas más vitaminas.
Por otro lado si no pruebas lo verde ni por asomo ¡Tampoco pasa nada! Pues no se trata de pasar de 0 a 100 de hoy a mañana, sino de fijar pequeñas metas que irás alcanzando.
Por ejemplo:
¿Qué te parece como objetivo 1 pieza de fruta (la que tú quieras) y una ración de verdura al día (ensalada, menestra, salteado, verdura cocida o en alguna receta de crema)?
Cuando lo consigas puedes ir aumentando esta cantidad poco a poco hasta llegar a las 3 piezas de fruta y 2 raciones de verdura diaria.
Apuesta por las grasas buenas
Elige aceite de oliva para cocinar y aliñar junto con alimentos ricos en grasas saludables.
¿Qué alimentos son ricos en grasas saludables? Los frutos secos, el aguacate y el pescado.
Por contra, huye de grasas vegetales refinadas (palma, girasol, maíz…) presentes en la mayoría de alimentos procesados.
Si quieres saber más sobre este tema, hace un tiempo, mi compañera Marián explicó en un artículo todo lo que debemos saber sobre las grasas.
En resumen, el punto 3 significa consumir alimentos naturales sin transformar y sin envases ni etiquetas ¡más alimentos frescos del mercado y menos procesados del supermercado!
Deja de ser carnívoro
Lo ideal es comer más pescado que carne, eligiendo pescados blancos de proximidad y azules de pequeño tamaño, esto es así porque contienen menos metales pesados que los grandes.
¿Qué pasa cuando quieras un trozo carne?
Cuando comas carne, intenta que sea carne de pasto y aves de corral evitando siempre procesados cárnicos (hamburguesas, salchichas…)
Por último potencia las legumbres (lentejas, garbanzos, alubias, habas, soja…) como fuente de proteínas 2 veces por semana al principio. Con el tiempo lo ideal es llegar a 4 veces por semana, es decir, ¡legumbres, legumbres y más legumbres!
Para beber: Agua
Así, tal cual: bebe más agua.
No hay bebida más saludable que el agua ya que, por mucho que nos empeñemos los refrescos están cargados de azúcar y sus versiones light de edulcorantes (que en tu organismo se comportan igual que el azúcar).
Tampoco tienes excusa para la cervecita o la copa de vino diaria. El alcohol “con moderación” no deja de ser alcohol y está relacionado con la aparición de distintos tipos de cánceres.
A todos nos pesa, pero por mucho resveratrol y antioxidantes que lleve el vino, no compensa el alcohol que contiene.
- Entonces ¿Qué bebo? Lo dicho, agua
- ¿Y cuando salgo? ¡Pues, agua con gas!
- ¿Y el vino y la cerveza? Muy de vez en cuando y nunca a diario.
¿Qué te han parecido estos consejos para comer sano? Fáciles, ¿verdad? Entonces aplícalos cuanto antes y verás como casi sin darte cuenta ¡Comerás más saludable, más sabroso y te sentirás más feliz!