Circuncisión médica masculina voluntaria para la prevención del VIH
Hoja informativa: Julio 2012
Datos clave
- La circuncisión médica masculina reduce el riesgo de transmisión sexual del VIH de mujer a hombre en aproximadamente un 60%.
- Desde 2007, la OMS y el ONUSIDA han recomendado la circuncisión masculina médica voluntaria como estrategia adicional importante para la prevención del VIH, en particular en entornos con una alta prevalencia del VIH y bajos niveles de circuncisión masculina, donde se maximizarán los beneficios para la salud pública. Catorce países de África oriental y meridional con este perfil han iniciado programas para ampliar la circuncisión masculina.
- La circuncisión médica masculina ofrece una excelente relación calidad-precio en tales entornos. Ahorra costes al evitar nuevas infecciones por el VIH y reducir el número de personas que necesitan tratamiento y atención para el VIH.
- Una intervención única, la circuncisión médica masculina, proporciona a los hombres protección parcial de por vida contra el VIH y otras infecciones de transmisión sexual. Siempre debe considerarse como parte de un conjunto amplio de servicios de prevención del VIH y utilizarse junto con otros métodos de prevención, como los preservativos femeninos y masculinos.
Descripción general
La circuncisión masculina es la extirpación quirúrgica del prepucio, el pliegue retráctil de tejido que cubre la cabeza del pene. El aspecto interno del prepucio es muy susceptible a las infecciones por el VIH. Los profesionales de la salud capacitados pueden extirpar de forma segura el prepucio de bebés, adolescentes y adultos (circuncisión médica masculina).
Pruebas convincentes para las recomendaciones
En 2007, la OMS y el ONUSIDA publicaron recomendaciones sobre la circuncisión masculina médica como estrategia adicional de prevención del VIH basada en pruebas científicas sólidas y coherentes. Tres ensayos controlados aleatorios realizados en Kisumu, Kenia, el distrito de Rakai, Uganda, y Orange Farm, Sudáfrica, han demostrado que la circuncisión masculina médica reduce el riesgo de transmisión sexual del VIH de mujeres a hombres en aproximadamente un 60%.
Los datos más recientes de Uganda muestran que en los cinco años transcurridos desde que se completó el ensayo en Uganda, se ha mantenido una alta eficacia entre los hombres circuncidados, con un efecto protector del 73% frente a la infección por el VIH.
Maximizar el beneficio para la salud pública
La OMS y ONUSIDA recomendaron que se añadiera la intervención en países con alta prevalencia del VIH, epidemias de VIH heterosexuales generalizadas y bajos niveles de circuncisión masculina, donde es probable que la intervención tenga el mayor impacto en la salud pública. Catorce países prioritarios con este perfil se esfuerzan por ampliar la circuncisión médica masculina voluntaria: Botswana, Etiopía, Kenya, Lesotho, Malawi, Mozambique, Namibia, Rwanda, Sudáfrica, Swazilandia, Tanzania, Uganda, Zambia y Zimbabwe.
La circuncisión médica masculina para la prevención del VIH ofrece una excelente relación calidad-precio. Estudios de modelos recientes encontraron que alcanzar una cobertura del 80% entre los hombres de 15 a 49 años de edad en los países prioritarios, al realizar aproximadamente 20 millones de circuncisiones, costaría US5 1.500 millones y daría como resultado un ahorro neto de US billion 16.500 millones para 2025 debido a los costos evitados de tratamiento y atención. Lograr y mantener una cobertura del 80% hasta 2025 evitaría 3,4 millones de nuevas infecciones por el VIH.
Un paquete integral de servicios de prevención
La circuncisión masculina es una intervención probada que ofrece protección parcial contra el VIH adquirido sexualmente en hombres. La OMS y el ONUSIDA recomiendan que siempre se considere como parte de un paquete integral de prevención del VIH que incluya::
- Pruebas y asesoramiento sobre el VIH;
- Uso correcto y constante de preservativos femeninos o masculinos;
- Tratamiento de infecciones de transmisión sexual; y
- Promoción de prácticas sexuales más seguras, como evitar las relaciones sexuales con penetración.
El suministro de tratamiento antirretroviral a las personas que viven con el VIH y que cumplen los requisitos para recibir tratamiento también debe considerarse como parte de un paquete de prevención combinada para reducir la transmisión del VIH en parejas en las que una de las parejas tiene el VIH.
Respuesta de la OMS
En consonancia con los objetivos mundiales, como el Objetivo de Desarrollo del Milenio 6 de detener e invertir la propagación del VIH y la Estrategia Mundial del Sector de la Salud de la OMS sobre el VIH/SIDA, la OMS y ONUSIDA, junto con el Plan de Emergencia del Presidente de los Estados Unidos para el Alivio del SIDA (PEPFAR), el Proyecto de ley & Fundación Melinda Gates y el Banco Mundial, en consulta con los ministerios nacionales de salud. El marco exige una respuesta más intensa por parte de los países y los asociados para “ponerse al día” con los hombres de 15 a 49 años de edad que no habían sido circuncidados anteriormente y establecer servicios sostenibles para lactantes y adolescentes a largo plazo. El marco promueve la implicación nacional, una combinación de enfoques y medidas estratégicas coordinadas.
A finales de 2011, se habían realizado más de 1,3 millones de circuncisiones médicas masculinas voluntarias para la prevención del VIH, con casi el doble del número de 2010 a 2011. A pesar del reciente aumento del ritmo, se necesitan esfuerzos específicos para lograr el número de circuncisiones médicas masculinas para lograr el máximo impacto en la salud pública sobre el VIH y el SIDA. Los principales desafíos incluyen fortalecer la promoción a todos los niveles, explorar enfoques innovadores para la prestación de servicios, incluido el uso de dispositivos médicos para la circuncisión de adultos, mejorar la logística de la cadena de suministro y el uso de recursos humanos limitados, y crear demanda de servicios.