Díez-Caballero Alonso Alberto
Intervención por laparoscopiaLa superespecialización es una parte fundamental de nuestro compromiso con los pacientes, ya que nos permite incorporar y ofrecer los últimos avances médicos obteniendo los mejores resultados en todos aquellos que depositan su confianza y su salud en nosotros.
La cirugía laparoscópica constituye uno de los grandes avances de la cirugía en el siglo XX al poder realizar las mismas intervenciones que en cirugía abierta pero evitando grandes incisiones.
Es la cirugía realizada a nivel abdominal mediante un abordaje a través de pequeñas incisiones (entre 2 y 15mm). Técnicamente consiste en crear un espacio a nivel abdominal tras la introducción de un gas (CO2). Por pequeñas incisiones en el abdomen introduciremos una cámara conectada a un televisor, a través del cual seguiremos la intervención, y también el instrumental necesario para realizar las diferentes maniobras de disección, corte, sutura, etc., que se precisen en la intervención.
Este tipo de cirugía se realiza en quirófano y habitualmente requiere anestesia general. No precisa ninguna preparación especial fuera de los estudios preoperatorios obligados para la cirugía que se vaya a realizar. Cabe destacar que no se trata de una cirugía menor sino que, realizada por cirujanos especialmente preparados en esta técnica, se consigue que algunas intervenciones quirúrgicas sean menos agresivas siendo igualmente eficaces.
Mediante cirugía laparoscópica podemos realizar cualquier tipo de técnica compleja, que en este caso se define como cirugía laparoscópica avanzada.
¿Qué enfermedades pueden intervenirse por laparoscopia?
Si bien su utilización más habitual y conocida es la cirugía de la vesícula biliar (colecistectomía), en los últimos años ha logrado un gran desarrollo su aplicación en otras enfermedades del aparato digestivo. Las patologías más frecuentes en las que aplica este tipo de cirugía son:
- Colelitiasis (piedras en la vesícula biliar)
- Apendicitis
- Hernia de hiato-reflujo gastroesofágico
- Cirugía del colon y recto
- Obesidad mórbida
- Hernia inguinal y eventración
- Glándula suprarrenal
- Bazo
- Cirugía de urgencia
La cirugía laparoscópica como recurso
Los avances médicos encaminados a mejorar el tratamiento de los pacientes y su calidad de vida han impulsado el desarrollo de las técnicas laparoscópicas.
En muchas operaciones ya ha sido aceptada la cirugía laparoscópica como primera opción. En otras, está en desarrollo por no haber mostrado claras ventajas respecto a la cirugía convencional.
En general, la laparoscopia es especialmente ventajosa en aquellas cirugías que precisan grandes incisiones y es más controvertida en aquellas otras en que la agresividad de la intervención viene dada por el procedimiento en sí.
En Quirúrgica Cirujanos Asociados garantizamos la mejor asistencia quirúrgica y la aplicación de las técnicas menos agresivas y avanzadas.
¿Qué ventajas aporta la cirugía laparoscópica?
Al ser las incisiones tan pequeñas el dolor postoperatorio es menor. En consecuencia, la recuperación es mucho más rápida, mejorando la movilización precoz, estado general y de ánimo del paciente. La posibilidad de complicaciones en las heridas (infección o eventraciones, hernias en la herida operatoria), se reducen a porcentajes muy bajos en la cirugía laparoscópica.
También la menor manipulación de los tejidos e intestino (se realiza con pinzas más finas) hace que el riesgo de adherencias entre los tejidos disminuya y que el intestino recupere su movilidad antes, por lo que la ingesta se inicia antes.
Todo ello influye en una menor estancia hospitalaria con una rápida incorporación a la vida laboral y social. Los resultados estéticos también son excelentes.
En resumen, el paciente tendrá entre otros beneficios:
- Menos dolor postoperatorio
- Recuperación más rápida con estancia en el hospital más corta
- Retorno más rápido a su actividad habitual, laboral y física
- Mejor resultado estético
Otras ventajas derivadas de la técnica son:
- Dada la delicada y reducida manipulación de los tejidos el edema de los mismos, tras la cirugía, y las pérdidas de sangre son menores. Ello también influye en que la recuperación del funcionamiento del intestino (peristaltismo) es más rápida.
- Menor incidencia de complicaciones de las heridas (infecciones, hematomas, eventraciones, etc.).
- Se alteran menos los mecanismos de defensa (inmunidad) del paciente.
¿Existe alguna complicación relacionada con la cirugía laparoscópica?
A pesar de una correcta técnica quirúrgica pueden presentarse complicaciones, tanto derivadas del tipo de intervención realizada como específicas del abordaje laparoscópico.
Dentro de estas últimas las más frecuentes son el enfisema subcutáneo (presencia de gas debajo de la piel) y dolores referidos habitualmente al hombro. Estas complicaciones generalmente se resuelven con tratamiento médico y de forma global la suma de todas complicaciones no suele superar el 1% de los procedimientos laparoscópicos.
La gran mayoría de los pacientes operados por laparoscopia experimentan pocas o ninguna complicación y rápidamente vuelven a sus actividades normales.