Férulas en las espinillas (Síndrome de Estrés Tibial Medial)
Descripción General
Las férulas en las espinillas, también conocidas como síndrome de estrés tibial medial, son una afección que se caracteriza por dolor en la parte delantera de la parte inferior de la pierna, entre la rodilla y el tobillo. El estrés repetido en la parte inferior de las piernas impide que se reparen los huesos, los músculos y las articulaciones.
Por lo general, las espinillas afectan a las personas activas que participan en deportes como correr, tenis, fútbol o baloncesto. En algunos casos, el dolor es tan intenso que es posible que tenga que dejar de realizar la actividad que está haciendo.
Las espinilleras causan
Las espinilleras generalmente ocurren por uso excesivo o un aumento repentino en el entrenamiento atlético. En la mayoría de los casos, se desarrolla al realizar actividades repetitivas que estresan los huesos, los músculos y las articulaciones de la parte inferior de las piernas.
Las actividades que pueden causar dolor en las espinillas incluyen:
- Corriendo.
- Aumento del entrenamiento atlético.
- Aumente la intensidad del entrenamiento.
- Participar en una actividad que requiere para iniciar y parar de repente.
Síntomas de las espinilleras
El síntoma más común de las espinilleras es dolor o inflamación en el hueso de la espinilla. A medida que la afección empeora, el dolor se vuelve constante incluso cuando la persona no está practicando un deporte. Al principio de la progresión de la afección, el dolor mejorará con el descanso.
Complicaciones de las espinilleras
Si no se trata, las espinilleras pueden empeorar y provocar una fractura por estrés. Una vez que tenga férulas en las espinillas una vez, es más probable que las vuelva a desarrollar.
Factores de riesgo de dolor en las espinillas
Usted es más propenso a desarrollar dolor en las espinillas si:
- Use zapatos desgastados.
- Tienen problemas mecánicos, como pies planos o arcos altos.
- Practique o practique deportes en una superficie dura, como hormigón o una cancha de baloncesto dura.
- No está usando los zapatos adecuados para su deporte o su cuerpo.
- Falta de flexibilidad.
- Correr cuesta abajo, en un servicio inclinado o en terreno irregular.
- Participar en deportes que requieren arranques o paradas repentinos.
- Tener músculos apretados.
Los corredores, gimnastas y bailarines corren el riesgo de desarrollar férulas en las espinillas durante sus carreras.
Prevención de las espinilleras
Las espinilleras a menudo se pueden prevenir siguiendo estas pautas:
- Estírate antes de correr o hacer ejercicio.
- Descanso de trabajo en su horario de entrenamiento.
- Tren cruzado.
- Ejercicios alternativos durante la práctica.
Diagnóstico de férulas en las espinillas
Su médico puede diagnosticar férulas en las espinillas. Durante una visita a la clínica, su médico tomará una historia clínica completa, evaluará sus síntomas y cuándo comienzan y realizará un examen físico. Su médico también puede ordenar casos de diagnóstico, como una radiografía, una MIR o una gammagrafía ósea para determinar si tiene una afección más grave, como una fractura por estrés.
Tratamiento de las espinilleras
El primer paso en el tratamiento de las espinilleras es evitar la actividad, haciendo que el dolor permita que el área sane. El dolor normalmente se resuelve en unos pocos días con movimiento limitado.
Las medidas de autocuidado para tratar las espinilleras incluyen:
- Eleve las piernas
- Hielo en las espinillas para aliviar la hinchazón.
- Tome medicamentos para el dolor, como medicamentos antiinflamatorios no esteroideos.
- Use medias de compresión en sus espinillas.
- Use un rodillo de espuma en las espinillas.
La cirugía solo se usa si sus férulas en las espinillas están causando síntomas graves que han durado más de tres meses. Si usted es candidato para cirugía, su médico le realizará una fasciotomía. Durante una fasciotomía, el médico hará pequeños cortes en la fascia que rodea los músculos de la pantorrilla.
Cuándo buscar atención
Debe programar una cita con su médico si su dolor no disminuye incluso después de tratamientos conservadores como hielo, descanso y analgésicos o si su hinchazón no disminuye.
Próximos pasos
Siga cuidadosamente las instrucciones de tratamiento y recuperación de su médico para evitar complicaciones.
Si sus síntomas están empeorando o se vuelven graves, llame a su médico de inmediato.
Una vez que su afección haya mejorado, siga medidas preventivas como estiramientos, entrenamiento cruzado, descanso y ejercicios de fortalecimiento en su rutina diaria.